Palabras en el Acto de Grado UBV Eje Cacique Mara - Sede Zulia.
PROMOCIÓN: Bicentenario de la Victoria de Carabobo
30 de julio de 2022
José Javier León
Se dice fácil. Hoy es el primer acto protocolar de entrega de títulos que la Universidad Bolivariana de Venezuela en el eje Territorial Cacique Mara realiza desde aquel 03 de agosto de 2019. Apenas 3 años, que la pandemia convirtió en un antes y un después. Cuántas cosas han pasado. Cuántos, cuántas se han ido. Hasta el punto de que sentimos -al menos yo así lo siento- una extraña sensación de sobrevivientes. Comienzo con estas palabras porque necesario es rendir homenaje al compañero Jhasua Guerra, quien fuera nuestro coordinador de Ingreso y Prosecución estudiantil y que como miles de venezolanos y venezolanas, fue abatido en mala hora por la Covid 19. Sé que desde donde está, nos mira complacidos de que su ejemplo y perseverancia sigue activo en este equipo que hoy asumió con total éxito esta fiesta colectiva de logros y sueños alcanzados. Gracias a Cipee y a Protocolo que han desplegado toda su energía para que estemos acá imbuidos de amor patrio, dando y recibiendo los títulos que otorga la República. Palabras también especiales debo pronunciar a propósito del inmenso apoyo que nos ha brindado el Instituto Nacional de Capacitación y Educación Socialista, en la persona de su Gerente Regional José Vicente Faría Echeverri y en su adjunta Irene Moreno. Nos han dado acogida, nos han abierto sus brazos, para que la UBV en Maracaibo, pueda ofrecer digna presencialidad a sus labores administrativas y docentes. Valga recordar que nuestra sede histórica ubicada en La Rinconada, fue víctima como muchas instituciones públicas, del ataque despiadado que formó parte de la guerra híbrida a la que fuimos sometidos y que arreciara tras la muerte del comandante Chávez, que conllevó el desmantelamiento de infraestructuras básicas, de energía y comunicación, ataques coronados por el apagón -del cual aún hoy sufrimos las secuelas- que pretendió apagar el país y someternos a la oscuridad de un cambio violento de gobierno y a una más que probable guerra civil. A esa situación compleja, se sumó como ya sabemos la pandemia... pero como los venezolanos somos hijos e hijas de Bolívar y porque no se trata de un mero decir, vencimos las dificultades y tuvimos como país una de las mejores gestiones de la pandemia y, a pesar del bloqueo, alcanzamos un 100% de vacunación, reforzada y constante. Hemos tenido además, un casi insólito crecimiento económico y una evidente recuperación de las actividades propias de una población que trabaja y produce, desafiando lo que por un largo siglo se creía: que Venezuela no podría vivir sin renta petrolera. Pues bien, no solo seguimos adelante, sino que descubrimos un potencial que nos reafirmó como venezolanos y venezolanas hasta el punto de que estamos dando, pese al negocio que significa para la oposición la campaña destructiva contra el país, un cambio de 180° grados en la imagen nacional e internacional que ofrecemos ante propios y extraños. En este contexto de impulso y reimpulso, ocurre este acto. Son ustedes la primera promoción para decirlo de manera simbólica, que recibe un título que dice a los cuatro vientos soy venezolano, soy venezolana, y que con orgullo, satisfacción, responsabilidad y compromiso, jura entregar su ética y conocimientos a la labor impostergable de construir un país para todos y todas. Hoy pues, desde estas instalaciones también históricas, tocadas por el espíritu educador del maestro Luis Beltrán Prieto Figueroa y por la pasión de Simón Rodríguez, Inces y la UBV se hermanan para trazar un camino y un destino común, una educación con los pies bien puestos sobre la tierra, que siente/piensa proyectos que harán posible, como lo quería el comandante Chávez, el Vivir Bien. Egresados, egresadas, vayan con la frente en alto, defiendan su profesión y antepónganla al discurso que pretende seguir sosteniendo de manera cada vez más delirante, que no hay acá en esta tierra infinidad de oportunidades. Todo es posible si lo hacemos con entusiasmo, sacrificio y amor. Ya lo han demostrado y por eso, por ustedes, por su dedicación y esfuerzo, confianza y fe, estamos aquí, hoy, celebrando la vida. Sigamos juntos, haciendo Patria.